A lo largo de los siglos la humanidad se ha visto inmersa en distintas disyuntivas con el progreso, descubrimientos e inventos. La religión, guerras y su propia existencia les tenía divididos y ocupados como para preocuparse de banalidades como esas.
Pero nunca hasta ahora hemos visto tantos cambios tecnológicos como los que estamos viviendo en los últimos años, aún hay coches rodando que no tienen, sistemas de seguridad como ABS o Air-bag, ni comodidades como retrovisores o elevalunas eléctricos y hasta aún ruedan los que no tienen dirección asistida, frenos de disco o suspensión independiente. De eso hemos pasado a los mayores logros en seguridad, internet en tu propio vehículo, manos libres o coches que distinguen señales o cámaras con visión nocturna en el navegador. Algo que en ninguna otra época vivida hemos podido ver tecnologías tan dispares y tan cerca físicamente.
Pero si algo me fascina de todo esto es que a finales del siglo XIX teníamos una tecnología en los coches, que desechamos años después. Y que ahora más de un siglo después nos empeñamos en poner de manifiesto. ¿Dónde podíamos haber llegado de no ser por la codicia humana?, ya se, esta es una pregunta imposible de contestar y que no viene al caso.
La cuestión es que ya tenemos de nuevo aquí los vehículos eléctricos.
Creo con casi toda certeza que esta vez si, esta vez podemos decir que el futuro es esta tecnología, estoy seguro que dentro de una década veremos muchos más vehículos eléctricos por nuestras carreteras de las que no pudiéramos pensar hace apenas un lustro.
Espero poder ver a mi alrededor, en las ciudades, en el campo, en las carreteras…, que todo lo que me rodea en cuanto a coches, motos, camiones, autobuses, aviones, etc… son eléctricos o utilizan energías renovables de cero contaminación.
Soñar es gratis, ¿no? que es la vida sin sueños…
Video: Youtube
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